La piel es un órgano, lo que significa que lleva a cabo una serie de funciones complejas que incluyen:
– La protección de las estructuras corporales subyacentes
– Regulación de la temperatura
– La excreción de residuos
– La producción de productos químicos
– La absorción de las sustancias
Las capas superiores, la epidermis, proporcionan una barrera física, química e inmunológica, que se renueva constantemente cada 28 días aproximadamente, aunque esta tasa disminuye con la edad. Esa edad suele ser los 27 años ¡muy joven!
Las capas más profundas de la dermis y el tejido subcutáneo, contienen estructuras activas de la piel: los folículos pilosos y glándulas sebáceas, las glándulas sudoríparas, la sangre y los vasos linfáticos que suministra nutrientes y elimina los desechos, y las terminaciones nerviosas, todo ello apoyado por una base resilente con fibras de colágeno y elastina.
La elastina es otra proteína estructural que le da a la piel elasticidad y juventud. Considerando que el colágeno proporciona firmeza, la elastina es la proteína que actúa como una goma de borrar ya que mantiene una piel llena de vitalidad.